Cuanto mas lo pienso
más me sorprendo. Todo es tan efímero que asusta. Todo lo que conocíamos hasta hoy
puede mutar con la rapidez de una pestañear. El mundo que ayer existía cambió, es
diferente, un mundo maravilloso que pide a gritos que dejemos de dañarlo, hoy
nos obliga a reflexionar.
Somos pequeños
puntos en el universo, diminutas gotas de luz, sólo tenemos el derecho a vivir
y dejar vivir, salvando la paz, defendiendo al que no puede defenderse, amando
al que necesita ser amado. Nuestro
mundo, nuestro único hogar, nos pide que despertemos, que resistamos, que nos
unamos para mejorar, para evolucionar y para rescatar lo que parece perdido.
Prioricemos las cosas importantes, aportemos cada día algo que nos convierta en
seres un poco mejores, un poco más sabios, más prudentes, mas osados.
Hoy nuestra
obligación es vivir nuestra única vida de la mejor forma posible cuidando
nuestro único planeta y transformando lo malo para reconstruir un futuro mejor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario